Hoy, en el Domingo de Pascua de la resurrección del Señor, el Papa hace una bendición muy especial, llamada Urbi et Orbi. Hoy te compartimos su significado.
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¿Qué es la Oración Urbi et Orbi?
La Oración Urbi et Orbi es una solemne bendición que el Papa ofrece en momentos muy especiales del año litúrgico, especialmente en Navidad, Pascua y tras una elección pontificia. Su nombre proviene del latín y significa «a la ciudad (de Roma) y al mundo», lo cual refleja el alcance universal de este mensaje de fe, paz y esperanza.
Durante esta bendición, el Papa se dirige no solo a los fieles reunidos en la Plaza de San Pedro, sino a todos los católicos del mundo. Es una ocasión en la que se eleva una oración por los pueblos que sufren guerras, pobreza, persecución o enfermedades. También se concede la indulgencia plenaria a quienes reciben esta bendición con fe y en las condiciones adecuadas.
La Oración Urbi et Orbi se ha convertido en una expresión viva de la preocupación del Papa por la humanidad. Con ella, el Santo Padre recuerda que Cristo ha vencido a la muerte y que la esperanza no decepciona. Más que un acto protocolario, es un llamado a orar por la paz del mundo y por la conversión de los corazones.
Además, en años recientes, esta oración ha cobrado especial significado ante desafíos globales como la pandemia, los conflictos armados y las crisis humanitarias.
Mensaje del Papa Francisco en la Pascua de 2025
En la Pascua de 2025, el Papa Francisco, aún convaleciente tras una neumonía, impartió la bendición Urbi et Orbi desde el balcón de la Basílica de San Pedro. En su mensaje, hizo un llamado urgente a la paz, destacando los conflictos en Gaza, Israel y Ucrania. Condenó el antisemitismo y el sufrimiento de los pueblos en conflicto, pidiendo el cese del fuego y la liberación de rehenes en zonas en guerra .
A pesar de su estado de salud, el Pontífice presidió la celebración pascual desde una silla de ruedas, destacando que, aunque el mal persiste en la historia, la Pascua celebra el triunfo de la vida .
La Oración Urbi et Orbi se ha convertido en una expresión viva de la preocupación del Papa por la humanidad. Con ella, el Santo Padre recuerda que Cristo ha vencido a la muerte y que la esperanza no decepciona. Más que un acto protocolario, es un llamado a orar por la paz del mundo y por la conversión de los corazones.
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