La celebración del Miércoles de Ceniza nos invita hoy a una profunda revisión de nuestra vida, de nuestras actitudes y criterios de comportamiento; a iniciar un serio proceso de conversión y de purificación. Esta fecha marca la Cuaresma, que es un tiempo de gracia que Dios nos concede como un regalo.
La ceniza un recordatorio para todas las personas sobre nuestra mortalidad y la necesidad de arrepentimiento y reconciliación con el Señor por el bien de la vida eterna.
El tiempo de la Cuaresma es propicio para ejercitar nuestro cuerpo y alma a través del ayuno, la reflexión, la celebración y la toma de conciencia del nacimiento, los sufrimientos y la resurrección de Cristo.
Hoy te compartirmos 10 citas bíblicas que puedes reflexionar durante este tiempo y hacerlas parte de tu vida.
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Citas bíblicas para el Miércoles de Ceniza y la Cuaresma
Miércoles de ceniza y Cuaresma
Génesis 2:7
Entonces Yahvé Dios formó al hombre con polvo de la tierra; luego sopló en sus narices un aliento de vida, y existió el hombre con aliento y vida.
Reflexión: Dios creó a la humanidad al formarla del polvo y nos hizo vivir al soplar el aliento de vida en esos objetos inanimados. Por lo tanto, es a la misericordia y grandeza de Dios que debemos nuestra gratitud por la existencia.
Génesis 3:19
Con el sudor de tu rostro comerás el pan hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella fuiste tomado; pues polvo eres, y al polvo volverás.
Reflexión: a los seguidores de Dios se les debe recordar humildemente que todos los humanos nacen con una afinidad hacia el pecado por lo cual nos mueve constantemente hacia nuestra inexistencia y aquellos que buscan el arrepentimiento antes de que el Todopoderoso tenga la oportunidad de trabajar hacia la salvación. Para esta oportunidad, deben estar agradecidos a Cristo, por su sacrificio en nombre de toda la humanidad.
Números 19:17
Para la purificación de esa persona, se tomará un poco de ceniza de la hoguera donde se hizo el sacrificio de expiación y se la vaciará en un vaso de agua.
Reflexión: la ceniza se usa como un medio para purificar algo que se considera impuro y, de manera similar, los discípulos deben en este momento de reflexión humillarse y alabar a su Señor Jesús por Su desinterés al limpiarlos para que pueden salvarse aceptando la gracia de Dios.
Salmo 51
Ten piedad de mí, oh Dios, en tu bondad, por tu gran corazón, borra mi falta.
4 Que mi alma quede limpia de malicia, purifícame de mi pecado.
5 Pues mi falta yo bien la conozco y mi pecado está siempre ante mí;’
6 contra ti, contra ti sólo pequé, lo que es malo a tus ojos yo lo hice. Por eso en tu sentencia tú eres justo, no hay reproche en el juicio de tus labios.
7 Tú ves que malo soy de nacimiento, pecador desde el seno de mi madre.
8 Mas tú quieres rectitud de corazón, y me enseñas en secreto lo que es sabio.
9 Rocíame con agua, y quedaré limpio; lávame y quedaré más blanco que la nieve.
10 Haz que sienta otra vez júbilo y gozo y que bailen los huesos que moliste.
11 Aparta tu semblante de mis faltas, borra en mí todo rastro de malicia.
12 Crea en mí, oh Dios, un corazón puro, renueva en mi interior un firme espíritu.
13 No me rechaces lejos de tu rostro ni me retires tu espíritu santo.
14 Dame tu salvación que regocija, y que un espíritu noble me dé fuerza.
15 Mostraré tu camino a los que pecan, a ti se volverán los descarriados.
16 Líbrame, oh Dios, de la deuda de sangre, Dios de mi salvación, y aclamará mi lengua tu justicia.
17 Señor, abre mis labios y cantará mi boca tu alabanza.
18 Un sacrificio no te gustaría, ni querrás si te ofrezco, un holocausto.
19 Mi espíritu quebrantado a Dios ofreceré, pues no desdeñas a un corazón contrito.
Reflexión: la cruz simboliza el esfuerzo de Dios para limpiarnos de nuestros pecados, y esto lo lleva a cabo a través del sufrimiento de su hijo, Cristo. Se debe prestar atención a esto y reflexionar sobre este acto con humildad y, bajo la gracia de Dios, seguir sus caminos hacia la salvación para la vida eterna con Él.
Eclesiastés 3: 18-20
18 Me dije a mí mismo, pensando en lo que es el hombre: Dios los pone a prueba, les demuestra que no son más que animales.
19 Pues hombre y bestia tienen la misma suerte; la muerte es tanto para uno como para el otro. El aliento es el mismo y el hombre no tiene nada más que el animal. Esa es otra cosa que no tiene sentido,
20 que todo vaya al mismo lugar. Todo viene del polvo y todo vuelve al polvo.
Reflexión: se debe entender que todos los humanos han venido a existir de la misma fuente y eso ha sido posible solo por la voluntad de Dios y todos terminarán como polvo, que es de donde han sido creados. Por lo tanto, toda su vida es posible debido a la grandeza de Dios, y esto debe humillarlos para tener fe en Él y alabarlo en toda Su gloria.
Daniel, 9
Me dirigí al Señor y le imploré, y durante cierto plazo le supliqué con oraciones y ayunos. Hacía penitencias vestido con un saco y sentado en el polvo.
Reflexión: Los discípulos deben orar a Dios con decisión y ser devotos y firmes en la práctica de su fe. Dios sólo requiere que su pueblo lo acepte y lo invoque de todo corazón, y siendo su creador y cuidador; Él cumplirá todas las promesas que estén de acuerdo con Su voluntad.
Mateo 4
Entonces Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto, para ser tentado por el diablo.
2 Y después de haber ayunado cuarenta días y cuarenta noches, tuvo hambre.
3 Y vino a él el tentador, y le dijo: Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en pan.
4 Él respondió y dijo: Escrito está: No solo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.
5 Entonces el diablo le llevó a la santa ciudad, y le puso sobre el pináculo del templo,
6 y le dijo: Si eres Hijo de Dios, échate abajo; porque escrito está: A sus ángeles mandará acerca de ti, y, En sus manos te sostendrán, Para que no tropieces con tu pie en piedra.
7 Jesús le dijo: Escrito está también: No tentarás al Señor tu Dios.
8 Otra vez le llevó el diablo a un monte muy alto, y le mostró todos los reinos del mundo y la gloria de ellos,
9 y le dijo: Todo esto te daré, si postrado me adorares.
10 Entonces Jesús le dijo: Vete, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a él sólo servirás.
11 El diablo entonces le dejó; y he aquí vinieron ángeles y le servían.
Reflexión: los seguidores de Dios deben reflexionar sobre la vida de su salvador Cristo y también celebrar a través de la oración y el ayuno, pues es importante recordar cómo Jesús ayunó no solo en términos de comida, sino también en muchas otras tentaciones que enfrenta como ser humano y aún así pasó. sin ningún pecado y eso es lo que uno debe aspirar a hacer.
Juan 14, 15-17
15 Si me amáis, guardad mis mandamientos.
16 Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre:
17 el Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce; pero vosotros le conocéis, porque mora con vosotros, y estará en vosotros.
Reflexión: las personas de verdadera fe conocen el significado de la vida de Cristo entre los humanos y cómo es de suma importancia para ellos confiar en él para guiarlos por el camino de la vida eterna. Él es el hijo de Dios, y Él sería quien daría paso; es decir, sería Él quien los absolviera de sus pecados y los guiara en los brazos de Dios para que obtengan la redención por Su gracia.
Mateo 6, 1-4
1 Guardaos de hacer vuestra justicia delante de los hombres, para ser vistos de ellos; de otra manera no tendréis recompensa de vuestro Padre que está en los cielos.
2 Cuando, pues, des limosna, no hagas tocar trompeta delante de ti, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles, para ser alabados por los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa.
3 Mas cuando tú des limosna, no sepa tu izquierda lo que hace tu derecha,
4 para que sea tu limosna en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público.
Reflexión: un seguidor de la verdadera fe no orará ni se entregará a la caridad solo por el bien de mostrar a los demás. Más bien, lo haría en secreto porque cree hacerlo con buenas intenciones, y de esta manera, podría caminar por el camino correcto de la rectitud.
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